Una buena formación y desarrollo integral de los niñ@s es fundamental. Sus aptitudes, actitudes y valores empiezan a formarse desde edades muy tempranas y no dependen solo de su educación en casa o en el colegio, hay otros muchos momentos que también influyen en su desarrollo futuro que se desarrollan en otros lugares.
Por ejemplo, gracias a la práctica del deporte los niños aprenden valores y descubren nuevas formas de relacionarse de una forma lúdica, algo muy positivo en una etapa de pleno aprendizaje. Los valores que transmite el deporte ayudan de forma positiva a configurar su forma de ser en todos los ámbitos de su personalidad.
Con el deporte, especialmente con aquellos que se juegan en equipo, los niños aprenden los distintos roles con los que van a tener que convivir en el futuro, se relacionan con otros niños con personalidades diferentes, aprenden a comprender y respetar las normas del juego, a saber comportarse correctamente o a tolerar distintos estados de ánimo y aprender de ellos: alegría, tristeza, frustración, etc.
Y no solo eso, también se desarrollan como personas individuales dentro de un grupo, obligándose a tener que tomar decisiones propias, fuera de la rutina, del entorno habitual del colegio y de su hogar.
En definitiva, el deporte les ayuda a formarse como personas dentro de un entorno amigable, donde el respeto a la diferencia, la creatividad, el esfuerzo y las normas forman la base de su desarrollo.
No comments:
Post a Comment